Los máximos responsables del POSE en la Región de Murcia y en Castilla-La Mancha, Pedro Saura y José María Barreda, demostraron ayer nuevamente la enorme diferencia que les separa sobre el futuro del trasvase Tajo-Segura. Mientras que Saura criticaba la «obcecación fundamentalista» de Barreda por el cierre del trasvase, el presidente de Castilla-La Mancha insistió en la clausura del congreso regional de su partido en rechazar el envío de agua para el regadío murciano.El secretario general del PSRM, Pedro Saura, considera como una «obcecación fundamentalista» las resoluciones del Congreso del PSOE de Castilla-La Mancha en lo que respecta al trasvase Tajo-Segura, de las que también dijo que «son miopes, de una gran cortedad de miras».El dirigente socialista murciano añade en una nota de prensa que «el trasvase Tajo-Segura ha sido la infraestructura más rentable para España de los últimos 100 años, también para Castilla La Mancha, pues ha permitido que haya agua tanto en la Región como en la propia región castellano-manchega».El secretario general de los socialistas murcianos asegura no tener «ninguna duda de que el Gobierno de España va a seguir avanzando en el blindaje del trasvase Tajo-Segura», y recordó que «los primeros pasos de este blindaje se han producido en la pasada legislatura, con la construcción del túnel Talave-Cenajo para que agua procedente del Cenajo sea trasvasada a Jumilla y Yecla, y para que también se lleve agua a Moratalla con el fin que desde allí se combine el agua del Taibilla con la del Tajo para dar de beber a una gran parte de la población regional».Saura explica además que el Gobierno de España «ha puesto en marcha las concesiones, vía escritura pública, de los derechos de agua del Tajo a las distintas comunidades de regantes del trasvase Tajo-Segura». «Ese es el blindaje más absoluto de los derechos de los regantes», apostilló.
«Paracaidistas»
A casi 400 kilómetros de distancia, en Toledo, el recién reelegido secretario general del PSOE de Castilla-La Mancha, José María Barreda, volvió a insistir en la clausura del congreso regional de su partido en la necesidad de clausurar el trasvase. Barreda se mostró convencido de que el PSOE ganará «siempre, por muchos paracaidistas que nos envíen», al tiempo que pidió «un gran esfuerzo para ponernos de acuerdo en un gran pacto nacional que garantice el agua para todos», insistiendo en la necesidad de que se revise la utilización del trasvase Tajo-Segura.El presidente de Castilla-La Mancha recordó que el Gobierno de esta región seguirá garantizando el agua para beber y para los hogares, sin embargo, continuó, el agua para regadío es un recurso económico que no se puede usar más allá de la cuenca hidrográfica en la que se encuentre.«Hay que acostumbrarse a que el desarrollo sea sostenible y el agua depurada y desalada debe usarse, porque no es posible mantener un desarrollo basado en un recurso que necesitan los castellano-manchegos», apostilló José María Barreda.El líder del PSOE de Castilla-La Mancha añadió que únicamente el PSOE puede hacer posible que en España «nos pongamos de acuerdo» en un pacto nacional que garantice el agua para todos, ya que «agua para todos sí, pero para todo, no».
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